La esposa de Tom Hardy está harta del amor por los caninos de Rich Jiu-Jitsu Campion de $ 55 millones: 'No se te permite traer otro perro del trabajo'
Tom Hardy, el inmensamente talentoso actor británico, no es solo una cara en la pantalla, su profundo afecto por los perros siempre ha sido un aspecto bien conocido de su personalidad. Sin embargo, este profundo amor por los caninos se ha convertido recientemente en una fuente de presión en su relación con su esposa, Charlotte Riley.
Informes anteriores sugieren que Riley, una actriz consumada por derecho propio, se ha cansado de la constante afluencia de perros en sus vidas debido a la dedicación inquebrantable de Hardy.
Charlotte Riley advirtió a Tom Hardy por su amor por los perros
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Tom Hardy adoraba a los caninos hasta tal punto que llevaría uno como acompañante al estreno de Legend, una película de gángsters donde interpretaba a los gemelos idénticos Reggie y Ronnie Kray.
Un labrador amarillo llamado Woodstock, cariñosamente apodado Woody, tuvo el privilegio de ser su cita. Woody no era un perro común y corriente, ya que se hizo famoso al aparecer en una campaña de PETA junto a su amado padre adoptivo.
El Comienzo La devoción de Star por sus compañeros peludos era inquebrantable. No solo los llevó a escenarios de cine y alfombras rojas, sino que también habló extensamente sobre ellos, admitiendo abiertamente su preferencia por los animales sobre los humanos. Él explicó,
“Soy el buscador de perros, sabes a lo que me refiero. Mi señora, ella dice, no se le permite traer otro perro de vuelta de un trabajo. Pero siempre encontraré uno. En cada trabajo que hacemos, busco el perro de alguien y lo cuido, o me llevo a mi perro, o encuentro un perro y lo llevamos a casa”.
Durante el rodaje de Ilegal en Atlanta, Hardy se topó con Woody deambulando por una carretera. Incapaz de resistir el impulso de rescatar al canino, lo trajo de vuelta a Londres.
A pesar de las objeciones de su esposa, siguió encontrando perros en cada trabajo, ya sea cuidando a otra persona o brindando un hogar amoroso a un nuevo amigo peludo.
Tom Hardy y su amor de toda la vida por los perros
El actor inglés no solo lo es por sus notables actuaciones en la gran pantalla, sino también por su profundo y perdurable amor por los perros.
Desde su adolescencia, el apego de Hardy por los caninos se hizo evidente cuando conoció a Max, una mezcla de pitbull y labrador que se convirtió en su fiel compañero.
Su vínculo era tan fuerte que el artista insistió en llevar a Max a sus clases de actuación, viéndolo como una fuente de apoyo y una imagen de amor inquebrantable.
Trágicamente, la muerte de Max en 2011 dejó un profundo vacío en el corazón de Hardy. Para honrar a su querida mascota, el actor optó por incinerar a Max y guardó sus cenizas en el sofá, donde el perro había disfrutado de innumerables momentos de compañía. El compartió,
“Max era mi unidad de apoyo, es como si tuviera un enfoque; Tenía identidad y autoestima más alta porque algo confiaba en mí y me amaba constantemente. Entonces me sentí importante. No soporto a ese tipo que pelea con sus perros.
El afecto de Hardy por los perros se extiende mucho más allá de las experiencias personales. Constantemente ha mostrado su dedicación al bienestar animal y la adopción.
Ya sea en platós de cine o en eventos públicos, se le ha visto con frecuencia acompañado de sus queridos caninos, lo que encarna la profunda conexión que comparte con estos leales compañeros.
Su pasión y devoción continúan inspirando a innumerables personas a considerar adoptar y cuidar a estas increíbles criaturas, destacando el poder transformador de la conexión humano-animal.
Fuente: Looper